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El cambio climático influye en la despoblación de igual forma que la despoblación influye en el cambio climático. Ambas son causas y también son consecuencias que se reflejan en el panorama actual. Despoblamiento y crisis climática es una mezcla mortal para las zonas rurales.

Los incendios descontrolados, el avance implacable de la desertización y la merma en la biodiversidad son las principales consecuencias en el medio ambiente por la intervención del cambio climático y la despoblación, dos realidades que se retroalimentan. Las características de este círculo vicioso son las siguientes.

1.- Las migraciones del medio rural a la ciudad

Según se retiran las personas del medio rural para concentrarse en las grandes ciudades, el campo se asilvestra al dejar de ser atendido por la población autóctona, con el consiguiente riesgo de incendios forestales, y un incremento de la fauna y la flora.

2.- Aumento de la temperatura

Las zonas rurales de España, donde es habitual que el sector primario y la industria agroalimentaria sean uno de los principales pilares económicos, se verán obligadas a cambiar su manera de vivir si la temperatura del planeta aumenta sin control. Más aún si se tiene en cuenta que nuestro país está considerado uno de los más vulnerables de la zona mediterránea a los efectos del cambio.

3.- Abandono de la actividad agraria y ganadera

El abandono de las actividades agrarias y ganaderas tradicionales provoca un aumento de la superficie forestal, que crece sin control, a merced de los incendios forestales, advierte la Red Española de Desarrollo Rural (REDR).

4.- La desertización avanza

Lo mismo sucede con la desertización. La existencia de cultivos permanentes en secano en zonas de topografía complicada, contribuye a evitar la erosión, a mantener el paisaje y a preservar la biodiversidad. Al dejarse estos cultivos, la desertización avanza sin control.

 

La conclusión, como se refleja en el artículo de  Jesús Marcos Gamero, investigador de la Fundación Alternativas y miembro del Grupo de Investigación en Sociología del Cambio Climático y Desarrollo Sostenible de la Universidad Carlos III de Madrid, es que el cambio climático, en su impacto sobre las sociedades humanas, tiene la capacidad de aumentar la desigualdad, la pobreza, las migraciones o los conflictos, tal y como ya se observa en diversos países.

Hay soluciones. Para hacer frente y anticiparnos a estos problemas será necesario que en los próximos años se desarrollen programas de ingeniería social, nuevos, innovadores e incluso traumáticos, pero necesarios para mantener la cohesión social, la equidad y la solidaridad de nuestra sociedad ante los impactos del cambio climático.

En este sentido, no tiene por qué considerarse un fracaso, ni ser descabellada la idea de colaborar en la repoblación de lo que se denomina ‘la España vacía’, por personas provenientes de zonas del sur peninsular cada vez más afectadas por los impactos del cambio climático.

 

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