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La casa donde vivimos es una de las inversiones más importantes de toda nuestra vida. Porque es en ella donde pasarán todas las cosas. Independientemente de que sea un apartamento o una villa, un piso o un chalet adosado, nuestra vivienda es el núcleo de nuestras operaciones vitales. Y debe estar cuidada al máximo según nuestros gustos.

Pero también es cierto que el tiempo pasa y que las necesidades que teníamos cuando se compró la vivienda van cambiando. Cambia el número de personas en la familia con la llegada de los hijos. Hay mascotas, nuevos vehículos y los hijos crecen. Y hay todo un catálogo de necesidades nuevas. Incluso cuando la familia ya se hace mayor y los hijos se marchan de casa.

En cualquier caso, siempre es bueno para afrontar las nuevas etapas de la vida plantearse una reforma de la casa para poder acoplarse y disfrutar de nuestra vivienda al máximo, con todas las comodidades y funcionalidades.

Consejos para reformar tu vivienda

A partir de este momento que se ha tomado la decisión, se pueden reformar los baños, la cocina, los dormitorios, o directamente, proponer realizar una reforma integral de la vivienda. Para todos estos casos, desde un simple adecentamiento y lavado de cara con una mano de pintura y un mantenimiento premium hasta tirar tabiques y adecuar la vivienda y sus habitaciones a los nuevos miembros de la familia, todo pasa por una adecuada planificación de la reforma de nuestra casa.

Te proponemos estos consejos para organizar perfectamente esta tarea de encarar la reforma de tu vivienda:

  1. Busca profesionales con referencias. Aún cuando sea una pequeña reforma, busca profesionales acreditados e, idealmente, con referencias.
  2. Solicita tres presupuestos. Una vez que tengas clara la reforma, pide, al menos, tres presupuestos diferentes.
  3. Fija, por escrito, una fecha de finalización. Una vez seleccionado un presupuesto, inclúyelo como anexo en el contrato de obras. Es vital que este contrato fije una fecha de finalización de la reforma, superada la cual el profesional deberá pagar una penalización (por ejemplo, 60 euros por día de retraso).
  4. Avisa a tus vecinos. Si la reforma es importante tendrás que pedir permiso a la Comunidad. Y necesitarás su apoyo unánime cuando las obras afecten a la estructura del inmueble.
  5. Mira a ver si necesitas una licencia. Hay reformas que precisan de una licencia de obra mayor, en cuyo caso hay que presentar en el Ayuntamiento un proyecto firmado por un arquitecto.
  6. Aprovecha el Plan Renove. Al coste de los materiales y la mano de obra, deberás sumar el de las licencias y tasas del Ayuntamiento. Y también deberás pagar el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras, que supone el 4% del presupuesto.
  7. Beneficiate de ayudas directas en tu Comunidad Autónoma. Otras ayudas directas, que pueden cubrir hasta el 40% del presupuesto, son las concedidas por el Ministerio de Fomento y las Comunidades Autónomas para reformas que:
    • Eliminen barreras arquitectónicas.
    • Contribuyan a ampliar la superficie útil.
    • Mejoren el aislamiento térmico y acústico.
    • Promuevan la eficiencia energética.
    • Renueven las instalaciones de agua, gas y electricidad y favorezcan el ahorro.

 

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Admin Cajamar