Una vez terminado el Black Friday, el Día de Acción de Gracias, el españolísimo puente patrio del Día de la Constitución y la festividad de la Inmaculada Concepción, es hora de preocuparse por las fiestas navideñas.
Una de las principales es controlar el gasto y poder, al mismo tiempo, ofrecer felicidad a todos nuestros seres queridos. Dentro de este concepto, sobresale entre todas la idea de cómo preparar de una manera efectiva la lista de la compra navideña.
Como en el caso de la organización de la cena o comida, lo primordial es volver a hacerte con lápiz y papel, o si eres 100% digital, apunta en tu bloc de notas de la tablet o el móvil un listado con todos los ingredientes que necesitarás para elaborar los menús. Ten en cuenta que es importante revisar lo que tienes en la despensa para no repetir comprar ni duplicar productos.
Consulta también con el resto de invitados si ellos se encargarán de llevar algunas cosas, como los turrones y mazapanes o algo de aperitivo. Es bueno realizar esta consulta para no encontrarte luego con alimentos por duplicado.
De igual forma, preocúpate de que la selección de vinos se reparta entre todos los invitados. Es una forma magnífica de hacerles partícipes de la alegría y que se impliquen en el diseño del menú con su aportación personal en forma de botella de vino.
Pautas para ahorrar en las compras navideñas
Una recomendación habitual es que compares los precios. Pueden variar considerablemente de un supermercado a otro. Y hay que elegir bien para conseguir un ahorro que puede llegar a ser de muchos euros.
Ten en cuenta además las siguientes pautas. Son muy importantes a la hora de las compras navideñas:
- Lo fresco se compra y cocina en el día. Si quieres cocinarlo el mismo día del evento para que resulte todavía más fresco, en vez de congelarlo, resérvalo con antelación. Así te ahorrarás disgustos de última hora que te obliguen a cambiar el menú. En esta época productos como el marisco son muy demandados. Por eso, si te aventuras a ir a comprarlo el último día puedes encontrarte con que ya no quede. Así que reserva.
- Los ingredientes no perecederos nos permiten ahorrar. Puedes comprarlos con tranquilidad semanas antes de la celebración. Te ahorrarás colas y subidas de precio, lo encontrarás todo más barato si lo adquieres con antelación, ya que no habrá tanta demanda.
- Las bebidas, por Internet. La mejor opción es pedirlas por internet y que te las lleven a casa para ahorrarte cargar con mucho peso. Piensa que cada botella pesa más de un kilo. Y a poco que compres unos refrescos, unas aguas, unos vinos y unas cervezas te plantarás con varias bolsas de entre diez y veinte kilos de peso. Toda una barbaridad.