Las motos eléctricas han llegado para quedarse. Son la revolución verde y sostenible y gracias a la inversión tecnológica han desarrollado unas motorizaciones efectivas. Las ventajas de los vehículos eléctricos son incontestables, y por esa razón, hay que seguir una serie de consejos para comprar una moto eléctrica.
Para empezar, las ventajas de las motos eléctricas están ya consolidadas. Estos vehículos no emiten CO2 y son silenciosos. Además, hay un gran ahorro en combustible. En efecto, el coste del combustible para el motor eléctrico es la décima parte del que tiene un motor de gasolina.
También se ha ido solucionando paulatinamente la cuestión de la recarga eléctrica. Un buen lugar es desde casa si se posee el punto de conexión adecuado. Por otro lado, las nuevas baterías de litio permiten desplazamientos superiores a los cien kilómetros.
Respecto a los consejos para comprar una motocicleta eléctrica, hay que tener en cuenta al menos estas cinco cuestiones. Serán una buena ayuda antes de comprar la moto eléctrica.
1.- La necesaria recarga de energía
Aunque la red se amplía de forma constante, es verdad que la red de electrolineras no puede compararse con la de gasolineras. Hay aproximadamente unas 1.500 y a la hora de realizar largos desplazamientos hay que realizar un estudio de detalle para la recarga energética, ya que los trayectos de un tirón se quedan en el centenar de kilómetros.
2.- La solución pasa por recargar en casa
La opción que se complica bastante cuando se trata de una comunidad de vecinos, en la que se debe instalar una toma y un nuevo contador o derivar el ya existente. Sí es cierto que el tiempo de carga y la autonomía de las baterías ha mejorado considerablemente en los últimos años.
3.- Una cuestión de comparar modelos y euros
Es una de las grandes bazas para saber si nos merece la pena adquirir una motocicleta eléctrica. Hay que ajustar las cuentas para saber si merece la pena el sobrecoste de adquirirla con el ahorro en gasolina que conlleva. La mejor fórmula es calcular el kilometraje realizado cada año y multiplicarlo por el precio del litro de combustible.
4.- Los gastos de mantenimiento, fundamentales
El mantenimiento de estas motos es mucho más bajo que el de las de gasolina. Debemos tener en cuenta que los componentes mecánicos eléctricos generan menos desgaste que los de explosión, por lo que a la hora del dinero tendremos un importante ahorro en reparaciones y sustitución de piezas.
5.- Los seguros, a tener en cuenta
En cuanto al seguro, también resultará más económico que el de una moto tradicional. Al tener una aceleración menor y averías también menores, su seguridad es mayor y las coberturas resultan más económicas.
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