Hasta el cambio de siglo, una persona bien informada tenía una dieta informativa diaria que podía comenzar con despertarse por la mañana escuchando los boletines informativos de la radio. El desayuno era para leer el periódico. De hecho, los que estaban muy informados leían un diario local o regional y uno nacional.
Y luego se completaba a lo largo del día la dieta informativa con los telediarios. Es decir, los informativos televisivos que aparecieron con la década de los años noventa tras finalizar el monopolio informativo de Televisión Española. Para terminar y cerrar el día, más radio.
Los fines de semana, además, tenían una especial incidencia de las revistas semanales que llegaron a protagonizar el escenario mediático, sobre todo en los años ochenta, con nombres propios .
Pero a partir del siglo XXI, con la irrupción de internet de forma popular, con la proliferación de los datos, los teléfonos móviles inteligentes y la denominada Web 2.0, el monopolio que hasta entonces tenían los medios de información se hizo mil añicos. Y cada consumidor de información, de noticias, cada persona, pudo empezar a elaborarse su dieta informativa particular.
Crece la consulta de información en redes sociales
De esta forma, cada persona tenía su forma de informarse sin apenas barreras de tiempo y espacio. A partir de entonces, las encuestas y los datos que éstas devolvían ofrecieron un panorama radicalmente distinto.
Hoy en día, aunque la televisión continúa siendo la principal fuente de información en España, la importancia de las redes sociales crece año tras año, según refleja la Encuesta de Impacto del Periodismo de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) correspondiente a 2017. Esta encuesta es una de las fuentes de datos empleados en el «Informe Anual de la Profesión Periodística«.
Al ser preguntados acerca de cómo habían recibido la información de actualidad en la última semana, el 75% de los españoles citaba la televisión en primer lugar, mientras que al 48% las noticias les llegaban a través de las redes sociales.
En comparación con los datos de hace un año, la televisión ha perdido tres puntos porcentuales, mientras que las redes han ganado 13.
Baja el consumo de prensa y radio
Y más aún. El consumo en España de diarios, suplementos, revistas y radio ha ido a la baja este año 2018 respecto al año anterior, según los datos de la tercera ola del año 2018 del Estudio General de Medios (EGM), publicado por la AIMC (Asociación para la Investigación de Medios de Comunicación).
Sólo el 22,8% de los mayores de 14 años consume diarios en España, frente al 24,3% del pasado año. Se trata de la cifra más baja de las últimas dos décadas. En el caso de las revistas, el porcentaje de lectores es del 29,7%, 3,1 puntos menos que el 32,8% del pasado año. Y para los suplementos, el porcentaje es de únicamente el 7,4% (frente al 8,7% de 2017).
La radio también ha retrocedido este año casi un par de puntos. Según el EGM, el 57,2% de la población española la escucha, frente al 59,3% del año anterior. La televisión, que es el medio más utilizado por la población española, ha perdido únicamente un par de décimas, quedando en un 85% de consumidores.