Las obras en nuestros hogares son siempre acciones que hay que planear con determinación. Cuando los trabajos estén terminados la vivienda quedará preciosa y a nuestro gusto. Pero si no lo hemos organizado bien se pueden correr unos riesgos innecesarios que harán este momento más desagradable de lo necesario. Una de las acciones que hay que realizar es el repintado del hogar para que luzca brillante y acogedor. Para ello, es imprescindible seguir una serie de recomendaciones.
1.- La organización
Lo primero de todo es la organización y la planificación. Tienes que decidir el orden de pintado de las habitaciones de tu hogar para poder recolocar todos los muebles y despejar las estancias. De esta forma tendrás amplia capacidad de movimiento para trabajar adecuadamente.
Luego tienes que tener preparado todo el material necesario para esta operación. Ocúpate de estar provisto de cinta de pintor, plástico o papel protector (o también sin muy útiles las sábanas viejas), masilla, lija, espátula, rodillo grande y pequeño, cubeta para rodillos, paletina, pintura y esmalte.
2.- El color
Si para gustos están los colores, que dice el refrán, imaginate la cantidad de colores y de tipos de pinturas que puedes encontrar en el mercado para pintar las habitaciones de tu vivienda. Las pinturas plásticas tienen productos especiales para los diferentes cuartos y habitaciones, ya sean los infantiles, los dormitorios, los salones, las cocinas y, por supuesto, las terrazas y zonas exteriores. También las encontrarás diseñadas para reflejar más luz en habitaciones oscuras, con efectos especiales que imitan diferentes texturas y materiales como mármol, estuco o, por ejemplo, metalizado.
Para elegir la pintura más adecuada tienes que tener en cuenta factores tales como el tamaño de la habitación, si tiene o no luz natural, la decoración que se ha utilizado y los colores que se han empleado en ella.
3.- Las distintas partes de la casa
La operación de pintar tu domicilio no solo tiene que tener en cuenta la distribución de las habitaciones para decidir cuáles se pintan primero y cuáles van después. También tienes que tener muy en cuenta el orden en que vas a pintar cada zona de cada habitación. Los profesionales recomiendan empezar por los zócalos. Una vez terminada esta tarea, tendrás que esperar 24 horas completas para que la pintura se seque.
El siguiente paso es pintar el techo de forma que si gotea sobre las paredes, podamos recubrirlas en un tercer paso. Las paredes se empiezan pintando por la parte de arriba y se va descendiendo hasta los zócalos. Se recomienda pintar con las ventanas abiertas o en corriente, para que la pintura se seque con más rapidez y también para que desaparezca el olor a pintura.
4.- El acabado
Ya estás a punto de terminar. En cuanto se haya secado la pintura, retira rápidamente la cinta de todas las partes de la casa donde la hayas utilizado. En caso contrario, se secará con la pintura y al quitarla dejará rastros o se llevará parte de la pintura con ella. Solo quedarán entonces los últimos detalles. Para estos retoques tienes que utilizar bien el rodillo pequeño bien un pincel.
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