Ahora mismo lo que priman son los viajes exóticos a lugares remotos. Pueden ser los Mares del Sur, la Australia profunda, las selvas ignotas de Brasil o una estancia en la helada Antártida. Atrás quedan las capitales incas, los reinos mayas, la península de Indochina y el delta del Mekong, China o las estepas mongolas. Y atrás quedarán los destinos exóticos de hoy en día cuando nuestros nietos nos cuenten sus lugares de vacaciones el día de mañana.
Los destinos de finales del presente siglo, si acaso no llegan incluso antes, serán impensables hoy en día salvo para la ciencia ficción y las películas de los superhéroes de la Marvel o DC Comics.
Estas son unas propuestas que, desde luego, suenan de forma inmejorable:
1.- La última frontera
«La última frontera» es el lema de la saga galáctica Star Trek. Es el espacio, y de la mano del desarrollo tecnológico, llegará por estos tiempos de nuestros nietos, el final del presente siglo, el turismo espacial. Va a haber varias opciones:
- Orion Span es una empresa que construye una estación espacial, la Aurora, que dicen que estará lista para visitar dentro de cuatro años ya. Se podrán ver auroras, cultivar alimentos, realizar experimentos y disfrutar de la gravedad cero. Está pensada para albergar a un total de seis personas, cuatro de ellos turistas. Cuesta diez millones de euros el viajecito a doscientos kilómetros de la tierra.
- SpaceX. Fundada por el dueño de PayPal y Tesla, Elon Musk, la gran cantidad de proyectos, sobre todo el de su vehículo sin conductor, hace que se haya postergado.
- Virgin Galactic. Otro que va con retraso, pero que ya llegó incluso a vender billetes para viajes espaciales por un cuarto millón de euros. Sin embargo, ha habido numerosos retrasos desde que se planteara el primer vuelo en 2009.
2.- Viajes submarinos
Los viajes al fondo del mar se pondrán de moda. Bien es cierto que, hoy por hoy, ya hay hoteles que cuentan con habitaciones bajo el mar, pero los edificios están construidos en la tierra.
Se tratará ahora de auténticos hoteles sumergidos con habitaciones de lujo con ventanales iluminados para contemplar el fondo del mar.
Las estancias submarinas también se completarán con los viajes submarinos, sin necesidad de ser un preparado deportista.
3.- Destinos y habitaciones a la carta
La web semántica y el big data con el smart data harán posible perfiles personales que se adapten perfectamente a la experiencia que buscará cada grupo de clientes.
Será un nivel máximo de personalización a la carta de nuestros gustos, destinos o, incluso, de las habitaciones del hotel, desde la temperatura del aire a la presión de la ducha. Todo estará ajustado específicamente para ellos, así como el ocio.
4.- Zonas prohibidas
El viajero lo sabe. El turista lo desconoce. La geopolítica y el orden internacional cambia con el paso de los años los destinos. Lugares que antes están prohibidos, hoy son más que accesibles. No hay mejor ejemplo que el de Rusia, con su Mundial de Fútbol.
Hasta principios de los años noventa no se podía visitar la entonces llamada Unión Soviética y hoy fían al turismo recursos económicos e imagen internacional. Abren sus puertas para que vayamos. Lo mismo pasa ahora con lugares como Camboya, el África subsahariana o Siria y Afganistán. ¿Cuáles serán las zonas prohibidas del futuro?