La postverdad es un concepto tan usado como confuso. De reciente creación, ha llegado incluso a ser considerado por el Diccionario Oxford como la palabra del año, dado su contumaz uso de un tiempo a esta parte. Para saber lo que es la verdad, hay que bucear asimismo en el imperio oscuro de las denominadas fake news, que son las que crean las distintas postverdades al interés del mejor postor en cada caso.
Juan Luis Cebrián, primer director del diario El País, alerta del impacto de la posverdad y de las fake news en la democracia, en una conferencia dictada ya en noviembre de 2017. En ella, explica los conceptos de postverdad y fake news. “Sin una formación de la opinión pública adecuada no habrá una democracia representativa que funcione y ello generará un aumento del populismo y una disminución de la conciencia social«.
Este contexto, dominado por la confusión, propicia, en su opinión, un caldo de cultivo para la expansión de la posverdad y las fake news en el que es cada vez más difícil distinguir «lo bueno de lo malo, lo auténtico de lo que no lo es«, explica.
5 claves para identificar noticias falsas
Sobre la posverdad dice que no son exactamente «las mentiras de siempre«. Y explica que en la Real Academia, donde se discute su definición, se considera que este concepto se identifica con «una verdad emocional» que no se basa en hechos objetivos sino en las emociones de quienes las emiten y de quienes las reciben.
Es una verdad ficticia, impostada, basada en hechos alternativos, como dirían los portavoces de la Casa Blanca. Sobre las fake news explica Cebrián que son «noticias disfrazadas» y ha atribuido su origen en la respuesta de los movimientos antisistema al poder constituido.
Una vez aclarados los conceptos, ¿cómo descubrir las postverdades y las fake news? Estas son cinco reglas que todo internauta debería conocer para identificar las noticias falsas:
1- ¿Quién publica la historia?
Puedes creértela si la noticia ha salido en los periódicos de cabecera de tu país o del ámbito internacional. Si es una exclusiva de una página desconocida de Internet o de un medio del que vale la pena desconfiar, no te lo creas. ¿Acaso crees que nadie más hablaría de esto si fuera cierto?
2- Periodismo satírico
Algunos bulos no son publicados como tal, sino que son noticias satíricas de medios especializados. El problema es que solemos compartirlas como si de algo serio se tratase.
3.- Manipulación de datos
En otros casos, los más complicados, hablamos de noticias verdaderas a las que se le han añadido connotaciones falsas con intención de distorsionar la realidad. Por ejemplo, una agresión a una enfermera. Se dice que es en España y que el agresor es musulmán, pero es algo que ocurrió hace años en Rusia.
4.- Hay que leer toda la noticia
Nunca leas solamente el titular, ya que puede que no refleje la verdad de la historia.
5.- ¿Citas falsas?
No, gracias. Nunca te creas una cita cuando el medio no especifique la fecha ni la fuente.