Las empresas que quieren comenzar un proceso de expansión necesitan un documento que debe incluir un análisis de la situación de la empresa, de sus fortalezas y del entorno en el que se va a producir este movimiento. A todo este cúmulo de información, organizada de forma sistemática en torno a un modelo con objetivos, se le denomina plan de expansión de la empresa.
Un plan de expansión de una empresa, por tanto, busca una serie de objetivos:
- El principal pasa por dibujar una previsión de crecimiento en volumen de trabajo, crecimiento territorial nacional, internacional o en forma de negocio en internet.
- También se presentan los objetivos secundarios. Entre ellos, cabe destacar los pasos establecidos en una guía para realizar la expansión, detectar posibles problemas en la puesta en marcha o hacer una presentación de la empresa frente a inversores, nuevos distribuidores o socios de la empresa o entidades financieras.
El documento que resulta para aplicar el plan de expansión de la empresa es fundamental para controlar su desarrollo. Igualmente, lo es para prevenir posibles errores o desviaciones del negocio en el nuevo entorno de trabajo. Por último, facilita el acceso a financiación, ya que es un tipo de documentación que se puede presentar a la hora de solicitar créditos o ayudas. Las claves que este plan de expansión para una empresa debe incluir son las siguientes.
1.- La estrategia, lo primero de todo
El primer paso a la hora de crear un buen plan de expansión es definir la estrategia, que deberá cumplir varios objetivos. Entre ellos, la penetración de mercado, el desarrollo de producto, el desarrollo de mercado, la diversificación, entendida como la estrategia más disruptiva, la que implica más cambios. Supone hacer un giro bastante importante en lo que es la actividad normal de la empresa. Efectuar modificaciones en el modelo de negocio, en los productos o servicios y buscar nuevos clientes.
2.- Un DAFO para analizar la empresa
Para poder planificar su evolución, la empresa tiene que saber cuál es su punto de partida, y no hay mejor forma de hacerlo que a través de un análisis DAFO (Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades para su negocio.
Este análisis va a poner de relieve las debilidades y fortalezas internas, pero también las amenazas y las oportunidades que hay en el entorno.
3.- Conocer los secretos del entorno
Al elaborar el plan de expansión es muy valioso hacer un análisis de la situación real que está afrontando el entorno. Solo así se pueden trazar metas que sean posibles de alcanzar. Y, por supuesto, no hay que olvidarse de investigar qué está haciendo la competencia.
4.- Marcar los objetivos SMART
Del DAFO al SMART, hay que marcar los objetivos, basándonos en el modelo SMART: Específicos, Medibles, Alcanzables, Relevantes y Temporales (Specific, Measurable, Achievable, Realistic y Timely driven). Esto nos dirá qué es lo que tenemos que hacer y hacia dónde debe encaminar la empresa sus esfuerzos.
5.- Hay que tener un plan y actuar
En este paso definimos tareas y las asignamos a los diferentes equipos de trabajo, aportando también los recursos para ello.
6.- Invertir en los recursos necesarios
Si queremos lograr los objetivos, la empresa deberá hacer el esfuerzo de invertir en esos recursos.
7.- Sin equipo no eres nadie
Hay que asegurarse de que todos los implicados estén bien capacitados para realizar las tareas que se les han asignado.
8.- Control ejecutivo del plan
La monitorización es esencial para saber si ese plan que hemos desarrollado y puesto en marcha está teniendo éxito.
