Dos personas caminan a las siete de la tarde de cualquier martes por las calles de su barrio de cualquier ciudad de este país. Llevan sus bolsas de deporte, sus mochilas a la espalda. Lucen prendas deportivas pero olvídense del chándal, que ya pasó a la historia. Son unos leggings con unas camisetas a juego. Van muy animadas.
No saben ni de lejos, o quizás sí, que la clase práctica de yoga que van a realizar en los próximos minutos llegó a Occidente y, por ende, a nuestro país gracias a cuatro chavales de Liverpool a los que, a finales de los años sesenta, les dio por la meditación trascendental, como se le llamaba en aquél momento, y que ahora se conoce como yoga.
Sí, fueron los Beatles quienes dieron a conocer esta suerte de disciplinas orientales cuando viajaron en 1968 a la ciudad india de Rishikesh, mundialmente famoso por ser conocida como la capital mundial del yoga. También denominada la Puerta del Himalaya, es una ciudad sagrada en la que hay todo tipo de escuelas que atraen a los turistas que buscan realizarse con esta disciplina ya tan conocida ya tan de moda que es el yoga.
Mejora física, mental y espiritual
Pero, ¿qué es el yoga? La definición tradicional define el yoga como “una tradicional disciplina física y mental que se originó en la India. La palabra se asocia con prácticas de meditación en el hinduismo, el budismo y el jainismo”.
La práctica del yoga, que está tan de moda de un tiempo a esta parte en nuestro país, mejora, según sus profesores y practicantes la forma física, la forma mental y la forma espiritual. Un tres en uno bastante recomendable.
Respecto a la mejora que el yoga logra del estado físico y de salud del practicante, puede decirse que para los practicantes del yoga la salud no solamente es la ausencia de males y no padecer enfermedades, sino que la práctica del yoga busca un equilibrio que refuerza a sus practicantes. Aquí es donde cobra tanta importancia las disciplinas de respiración, de meditación y los ejercicios físicos.
Tiene muchos beneficios la práctica del yoga, no solamente conservar la salud, sino que permite:
- Adelgazar, al realizar ejercicio físico.
- Estira el sistema muscular, lo que previene las contracturas y los dolores de espalda y de cuello tan habituales en el mundo laboral de hoy en día.
- Fortalece el sistema de defensa frente a virus tan desarrollados como el de la gripe.
Un tercer aspecto es el que tiene que ver con el equilibrio mental y espiritual. La concentración y la meditación que implican la práctica del yoga hace que se encuentre, según los usuarios, la paz interior. Es entonces cuando se habla de conceptos como el del equilibrio espiritual o el de la paz interior.
Llegados a este punto, al tener mejor forma física, que se basa en fortaleza y también en tener a punto otras capacidades como la elasticidad, la agilidad y, también, la capacidad para evitar enfermedades, también se procura un equilibrio interior lejos de tensiones tan propias de nuestras rutinas diarias. Con lo que las mejoras en los ámbitos laborales al producir mejor y concentrase mejor, en las relaciones afectivas y en las relaciones familiares, es patente entre los practicantes avanzados de las disciplinas que promueve el yoga y que lo ha puesto tan de moda.