El enoturismo o turismo enológico es un tipo de turismo enfocado en las zonas de producción vinícolas. Se relaciona con el turismo gastronómico y con el turismo cultural dependiendo del carácter histórico o artístico de la industria vinícola en la zona como patrimonio industrial.
También se han desarrollado tratamientos de belleza y salud basados en vinos, denominados vinoterapia. El enoturismo ofrece a las bodegas la posibilidad de promocionar el origen de sus productos. Y pueden disponer de tienda o posibilidades de ofrecer una cata. Estas son algunas de las rutas enoturísticas más interesantes:
1.- Ruta del Txakolí
Situada en el nordeste de Álava, a 20 Km. de Bilbao y a 35 Km. de Vitoria-Gasteiz, la Ruta del Txakolí engloba municipios tan bellos y dispares como Artziniega, Ayala, Llodio, Okondo y Amurrio, así como el municipio vizcaíno de Orduña. La arraigada tradición gastronómica de la comarca, rica en productos artesanales, es una de sus señas de identidad.
Este vino blanco típico de Euskadi, se elabora principalmente con la uva autóctona Hondarribi zuri. Se trata de un vino ligero, afrutado, ligeramente espumoso y con un toque ácido y refrescante, que encuentra en Aiaraldea un clima propicio para su cultivo.
2.- Ruta del vino de Arlanza
A través de la Ruta del vino de Arlanza descubrirás su historia, la historia de los romanos que poblaron las orillas del Arlanza dejando su impronta. Es también la historia de una Reconquista que sembró esta tierra de una importante cadena de fortalezas y gentes venidas del norte peninsular, germen de la Castilla Condal, esencia de la Castilla actual.
La uva Tinta del País o Tempranillo, adaptada a la zona desde tiempo ancestral, confiere a los vinos de la Ruta del vino de Arlanza, una personalidad propia. Otras variedades, como las uvas Garnacha, Mencía, Cabernet Sauvignon, Petit Verdot, Merlot, Albillo o Viura, también son variedades autorizadas por el Consejo Regulador D.O. Arlanza.
3.- Ruta del Vino de Jumilla
La Ruta del vino de Jumilla se sitúa al noroeste de la Región de Murcia, enclavada entre la zona de tránsito de la Mancha, Andalucía y Valencia. En Jumilla se pueden encontrar vestigios históricos y artísticos de todas las civilizaciones que han habitado el Mediterráneo.
La ciudad que los árabes llamaron La Fuerza del Vino es una red de calles blasonadas coronada por un imponente castillo del siglo XV, símbolo de la ciudad y accesible desde el camino del Subidor, en el que se encuentran bellas vistas panorámicas del municipio.
Los vinos de la D.O. Jumilla están elaborados a base de la uva monastrell, que representa más del 80% de la superficie cultivada. De esta variedad se obtienen vinos potentes y expresivos, con unos colores violáceos y una redondez muy difícil de superar.