Los móviles ya no son teléfonos. La gran mayoría de las personas apenas los utilizan para hacer llamadas. En el caso de los adolescentes, el móvil se usa para estudiar, para jugar, para socializar. Es importante, entonces, regular el uso de los móviles a nuestros hijos. Así podrán aprender y realizarán mucho mejor todas las tareas y, de paso, se evitarán problemas.
1.- Empieza por ti mismo
Lo mejor es que vean que los padres también realizan un uso responsable de los móviles. Es fácil de comprender y de explicar. SI tus hijos te ven todo el día con el móvil entre las manos será bastante complicado explicarles que solo pueden utilizarlo en determinados momentos.
2.- Hay un tiempo para el móvil
No se puede esta todo día con el teléfono entre las manos. Hay momentos que deberán considerarse algo así como sagrados. Los desayunos, la comida y las cenas que se realizan en familia deberían ser sin la presencia de los móviles, por ejemplo. Se puede aprovechar de paso para comentar la jornada del día.
3.- Dormir desconectados
Los aparatos electrónicos afectan a la calidad del sueño. Estimulan áreas del cerebro que no permiten descansar bien, lo que se traduce en nerviosismo, irritabilidad y cansancio. Por tanto, fuera tecnología para dormir. Lo mejor y más relajante, sustituirlo por un libro.
4.- Educación y respeto
Enseñarle a usarlo respetando a los demás. Que aprenda que hay que apagarlo o silenciarlo en ciertos lugares públicos donde pueden molestar a los demás, como el cine. Procura que cuando vaya andando, esté pendiente de por dónde va y de los semáforos, no del teléfono. Si se visita a familiares como los abuelos, no estar todo el rato enganchado al móvil y aprovechar para conversar con ellos.
5.- Limitar la tarifa de conexión
Contratar una tarifa limitada para que haga un uso racional. Es importante que aprenda pronto que se debe hacer un consumo responsable.
6.- Limitar aplicaciones y juegos
Junto al tiempo de uso del teléfono móvil, otra queja frecuente en muchos padres y madres es qué aplicaciones utilizan, especialmente redes sociales y mensajería, o a qué juegos juegan.