Una cadena de bloques o cadena articulada, conocidas en inglés como Blockchain es una base de datos distribuida, formada por cadenas de bloques diseñadas para evitar su modificación una vez que un dato ha sido publicado. Para lo que usa un sellado de tiempo confiable que siempre enlaza a un bloque anterior.
Una base de datos distribuida (BBDD) es un conjunto de múltiples bases de datos lógicamente relacionadas las cuales se encuentran distribuidas en diferentes espacios lógicos y geográficos. Por ejemplo, un servidor corriendo 2 máquinas virtuales e interconectados por una red de comunicaciones.
Dichas bases de datos tienen la capacidad de realizar procesamiento autónomo. Lo que permite realizar operaciones locales o distribuidas. Un sistema de Bases de Datos Distribuida (SBDD) es un sistema en el cual múltiples sitios de bases de datos están ligados por un sistema de comunicaciones. De tal forma que un usuario en cualquier sitio puede acceder los datos en cualquier parte de la red exactamente como si estos fueran accedidos de forma local.
Almacenamiento, transmisión y confirmación de datos
Por esta razón, una cadena de bloques, es especialmente adecuada para almacenar de forma creciente datos ordenados en el tiempo y sin posibilidad de modificación ni revisión. Este enfoque tiene diferentes aspectos:
- Almacenamiento de datos: Se logra mediante la replicación de la información de la cadena de bloques.
- Transmisión de datos: Se logra mediante peer-to-peer.
- Confirmación de datos: Se logra mediante un proceso de consenso entre los nodos participantes. El tipo de algoritmo más utilizado es el de prueba de trabajo en el que hay un proceso abierto competitivo y transparente de validación de las nuevas entradas llamada minería.
En resumidas cuentas, como explican en Retina, del diario El País, “una blockchain es una inmensa base de datos que se distribuye entre varios participantes. Es decir, es un libro de registro (ledger en inglés) inmutable que contiene la historia completa de todas las transacciones que se han ejecutado en la red. A cada participante se le llama nodo, que en realidad viene a ser un ordenador más o menos potente. Estos nodos se conectan en una red descentralizada, sin un ordenador principal. Son redes llamadas P2P que hablan entre sí usando el mismo lenguaje (protocolo)”.
El ejemplo de Bitcoin
El concepto de cadena de bloque fue aplicado por primera vez en 2009 como parte de Bitcoin. En su origen, blockchain se inventó para sustentar una moneda digital: bitcoin. Fue la primera criptodivisa descentralizada no emitida por un banco central. Aquí, los que compran y pagan con bitcoins lo hacen en una red pública, y todos los nodos guardan una copia de cada transacción.
El primer uso que se le ha dado a la cadena de bloques ha sido en el sector financiero. Y la banca ha sido el primer ejemplo de una actividad que, según parece, puede ser desintermediada. Al menos en parte.
Respecto a las tendencias y el futuro, “tal vez impulsado por el aumento meteórico en el precio de Bitcoin, el primer ejemplo tangible de una tecnología de blockchain, el bombo creció alrededor de los libros contables cifrados y distribuidos en el sector financiero. Las startups de servicios financieros centrados en Blockchain recaudaron US$ 240 millones en fondos de riesgo durante la primera mitad de 2017. Sin embargo, su potencial comenzó a ser reconocido en otros sectores e industrias”.
2018 es probable que vea una continuación de esta tendencia de innovación y disrupción. Estas son las cinco formas clave en que esto es probable que suceda:
- Más uso fuera de las finanzas.
- Blockchain se encuentra con el Internet de las cosas.
- Contratos inteligentes.
- ¿Criptomonedas sancionadas por el estado?
- Una gran cantidad de iniciativas de blockchain fallarán.