Si los gigantes de Internet se meten a competir en las distancias cortas con el pequeño comercio en los servicios de entrega, habrá que estar atentos a cómo va evolucionando el mercado para no llevarse sorpresas. Estas son las armas con las que pueden competir los pequeños.
Sólo para productos de primera necesidad
Para no quedarse fuera, los pequeños deben tener claro que el envío en 24/48 horas debe estar en su portfolio de entrega. Y plantearse la entrega exprés en unas horas sólo si trabajan con productos de primera necesidad. Para que el consumidor pueda elegir qué es lo que prefiere.
“Desde mi punto de vista, la entrega en una hora o dos no es extensible al 100% de productos, ni es necesario en todas las ocasiones. En nuestro caso, por ejemplo, no tendría sentido para muebles de grandes dimensiones pero sí puede tenerlo para determinados artículos de puericultura de primera necesidad o para una futura sección de regalos. De hecho, estamos ya trabajando en algo similar para un futuro próximo”, explica Verónica Gortázar, directora de operaciones de eShop Ventures, un grupo de tiendas online verticales que incluye marcas como Mimub, Mamuky o El armario de la tele, entre otras.
Economía colaborativa
Incorporar más operadores logísticos y entre ellos los repartos basados en la economía colaborativa. Pueden ser una solución para la entrega de pedidos en cortos plazos de tiempo sin tener que montar una red de distribución propia.
De hecho, Wal-Mart, el gigante de la distribución de Estados Unidos, que ha comprado la startup Jet.com para competir con Amazon, ha sellado una alianza con las plataformas de transporte alternativo Uber y Lyft para mejorar el servicio de reparto a domicilio.
¿Cómo se preparan comercios más modestos? “Aunque creo que aún son muy recientes, sí creo que podremos empezar a utilizarlas muy pronto. Nosotros actualmente estamos en conversaciones con un modelo de entrega a domicilio muy innovador y sostenible que integra a personas con discapacidad. Por un tema de volumen, no será un servicio masivo que se ofrezca al 100% de los clientes, pero sí esperamos poder empezar muy pronto a trabajar con ellos”, explica Verónica Gortázar.
Puntos de recogida
También fundamental, estar al cabo delas tendencias en logística, quepasan por “ofrecer cada vez mássoluciones al consumidor. Los puntosde conveniencia, por ejemplo.También las consignas automáticasde la mano de Correos.
Y tener en cuenta que la logística no sólo es entregar. También es la información. La comunicación con el particular para que sepa en todo momento cómo está su envío. La cercanía con el cliente para que él elija cuándo y cómo le viene bien”,comenta Nicolás Mouze, director de ventas de DHL.
Turismo extranjero
Otra alternativa es competir por el turismo de compras de los extranjeros. “Es un segmento que en España no se ha desarrollado todavía, pero que lo hará. Lo vemos en Inglaterra, Francia, Alemania…gente que viene que compra cosas en tiendas y que les gusta el producto tradicional de las tiendas pequeñas de barrio. En España tenemos 70 millones de turistas. Nos preocupamos por la entrega en dos horas pero muchas tiendas no tienen ni página web. Y las que la tienen no tienen vocación internacional cuando el plazo de entrega a un país Europeo, en un servicio exprés, es de 24 horas. Igual que si se entrega en España”, comenta Nicolás Mouze.
Buscar nichos sin cubrir por los grandes
¿Y por qué no buscar productos que por su condición no se puedan entregar en un corto plazo? Hay productos que por su naturaleza, por el fabricante que los realiza, por la temporalidad, por el origen o por lo que sea, no pueden tener esa inmediatez de 24 horas.