IQ es el acrónimo por el que se conoce al coeficiente intelectual. IQ Financiero, por tanto, se refiere al coeficiente intelectual financiero. Un factor que surge de la combinación de disciplinas en teoría tan diferenciadas como la contabilidad, las inversiones financieras, la legislación e, incluso, el marketing personal y las ventas.
El IQ no siempre tiene una similitud con el coeficiente intelectual. Hay personas con un alto coeficiente intelectual pero con un escaso IQ Financiero. Dicho de otra manera, la inteligencia financiera no depende simplemente de la inteligencia en general.
De hecho, según Robert Kiyosaki, el gurú del IQ Financiero, “los problemas de dinero no se resuelven con dinero sino con inteligencia financiera”.
Por tanto, la inteligencia financiera es aquella parte del cerebro que se utiliza para resolver problemas financieros. Y el IQ Financiero es indicador que mide tu inteligencia financiera.
5 elementos para medir el IQ Financiero
El coeficiente intelectual es el resultado de una puntuación determinada según un test estandarizado diseñado para valorar la inteligencia. Muy diferente es el IQ Financiero. Que, según Kiyosaki, se compone de los siguientes 5 elementos:
- IQ Financiero 1: Producir más dinero. La mejor manera de conseguirlo es construyendo activos, fundamentalmente negocios. Cuantos más activos tengas, mayor será tu IQ Financiero.
- IQ Financiero 2: Proteger tu dinero. Es importante aprender a proteger tus activos. Por ejemplo, alguien con un IQ Financiero bajo, pagará siempre más impuestos. No tanto porque no los pague de manera ilegal sino o no conoce o no emplea herramienta legales que le ayudarían a proteger su dinero.
- IQ Financiero 3: Presupuestar tu dinero. Esta es una de las claves de la inteligencia financiera. De hecho, hay personas que ganan mucho dinero pero no lo conservan porque su forma de elaborar un presupuesto es inadecuada. Kiyosaki afirma que la mejor forma de presupuestar es pagándote a ti mismo en primer lugar. Sólo así podrás dirigir una parte de este dinero a reinvertirlo. El ganador de este juego será quien aprenda a gastar menos de lo gana e invertir el resto. Así, lo esencial es aprender a elaborar un plan que contemple un presupuesto que te permita disponer de un excedente para poder invertirlo.
- IQ Financiero 4: Apalancar el dinero. Cada euro que obtienes te ofrece dos opciones: gastarlo o invertirlo. El IQ Financiero se mide en base a las ganancias que consigues por tus inversiones. Para ello, es básico aprender a obtener ganancias, apalancando e invirtiendo tu dinero.
- IQ Financiero 5: Aumentar tu información financiera. Es el aspecto fundamental. La fórmula infalible para hacer funcionar los IQ anteriores pasa por obtener la suficiente información y formación sobre cómo funciona el dinero. Y uno de los principales errores es dejarlo en manos de expertos que no te ayudan a mejorar tu inteligencia financiera. De hecho, Kiyosaki apunta que “la mejor medicina a los problemas financieros es la educación”. Algunos estudios revelan que si se repartiera toda la riqueza del mundo entre cada habitante, sólo se tardarían 5 años o menos en que regresara al 5% de la población. Sobre todo debido a la falta de educación financiera.
Consejos para desarrollar tu IQ Financiero
Existen diferentes tests que te servirán para calcular tu cultura financiera. Todos ellos se centran en analizar tu educación financiera:
- ¿Conoces el significado de términos como amortización, deuda, aval, facturación, interés o mora?
- ¿Qué haces el día de cobro de tu nomina?
- ¿Qué porcentaje de tus ingresos destinas al ahorro?
- ¿Llevas un presupuesto quincenal o mensual de los gastos que tendrás en ese periodo?
- ¿Cuánto tiempo podrías mantener tu nivel de vida en caso de perder el empleo?
Son sólo algunas de las cuestiones que marcarán tu perfil financiero. Sin embargo, el IQ Financiero se puede desarrollar de manera continuada. Para ello, debes seguir algunos de estos consejos:
- Amplía la comprensión de tus conocimientos financieros con material de apoyo.
- Lee la sección de negocios del periódico.
- Aprende a distinguir los ingresos lineales (los que provienen de un sueldo) de los residuales (alquileres, rentas, inversiones,…)
- Lee informes de acciones de la Bolsa de Valores y no pierdas de vista el funcionamiento de algunas empresas en Bolsa.
- Hazte preguntas todos los días sobre cómo mejorar tu capacidad financiera.
- Rodéate de buenos empresarios y aprende de lo que hacen.
- Toma cursos de finanzas personales o cómo invertir de manera adecuada.
Desarrolla tu Inteligencia Financiera con un Simulador Virtual. Puedes encontrar varios interesantes en internet