Los teléfonos móviles se han convertido en las nuevas navajas suizas multiusos. Son ordenadores personales, teléfonos, cámaras de fotos, tarjetas de crédito, entradas a espectáculos o billetes de avión. Por citar tan solo algunos de los múltiples usos que permiten. La cuestión es que las más avezadas cabezas de las compañías tecnológicas ya están tratando de intuir los nuevos modelos y dispositivos que vendrán a sustituir al teléfono móvil.
Las últimas noticias señalan, sin ir más lejos, que la compañía Nokia baraja que los móviles están destinados a desaparecer en menos de una década. De hecho, esta predicción augura que el fin de los teléfonos inteligentes llegará antes de 2030 ya que Nokia considera que los teléfonos inteligentes se verán superados por la irrupción y desarrollo de la tecnología que entiende que tomará el relevo de los móviles: el metaverso.
Una nueva batalla
La nueva batalla se ha planteado a lo largo de todo este año 2023. Algunas de las grandes compañías tecnológicas pelean por dominar esta batalla que se aproxima de forma lenta, pero imparable.
Así, aunque en estos momentos es imposible imaginar el mundo sin el impacto de los teléfonos móviles, muchos expertos ya se atreven a hablar de la tecnología que sucederá a los teléfonos inteligentes. Y, aunque Nokia consideró que el sustituto será una herramienta que no termina de despegar, el metaverso, parece que los tiros van por otros derroteros.
En su momento, uno de los creadores de los teléfonos modernos señaló que, bajo su percepción, el futuro de los smartphones está dentro de la piel. Sin embargo, Imran Chaudhri, cofundador de Humane, ha presentado ya el dispositivo estrella de su startup: un gadget capaz de llevar la experiencia de un teléfono inteligente a la palma de tu mano. Y, aunque parezca una idea tan alocada como futurista en estos momentos, el uso de aspectos como la inteligencia artificial ha levantado el interés de muchos usuarios.
La respuesta de Silicon Valley
La respuesta de Silicon Valley a todos estos primeros movimientos se ha hecho palpable y se basa en la unión de varias empresas tecnológicas para desarrollar un dispositivo que ofrecería los beneficios de la IA, la Inteligencia Artificial, el nuevo actor que ha llegado este año 2023 de forma decidida. Y tratará de superar el actual formato, sin las restricciones de la pantalla rectangular que ha sido el dispositivo dominante de la última década.
Muchos ejecutivos del sector creen que la tecnología tiene el poder de introducir un nuevo paradigma en la informática que denominan “computación ambiental”. En vez de teclear en teléfonos inteligentes y tomar fotografías, imaginan un dispositivo en forma de algo tan sencillo como un colgante o unas gafas que pueda procesar el mundo en tiempo real, para lo que se utiliza un sofisticado asistente virtual capaz de responder preguntas y procesar imágenes.