San Valentín es el Día de los Enamorados. Cursi para unos, hortera para otros, fundamental para muchos de los que se aman. Es una festividad que viene desde la Antigua Roma y ha llegado a nuestros días envuelto en cierto éxtasis comercial.
El origen en la antigua roma
Las lupercales era una fiesta pagana que se celebraba el 15 de febrero en la Antigua Roma. Su nombre deriva de lupus (lobo, animal que representa al Fauno Luperco, romanización del griego Pan, dios de la fertilidad y sexualidad masculina), un animal clave en la fundación de la mítica ciudad. Desde los primeros días de Roma, esta fecha, rito para la fecundidad, estaba reservada para este extraño festival.
La evolución cristiana
La lasciva obscenidad y gran carga sexual de la anterior festividad para el cristianismo emergente hizo que el Papa Gelasio I la prohibiera en el año 494. Este ritual anual para la fertilidad que tantos ansiaban fue sustituido por la conmemoración del martirio de San Valentín el 14 de febrero del año 270.
Su llegada a la actualidad
En 1948, el periodista César González-Ruano, escribió un artículo en el que proponía la idea de importar la celebración de San Valentín desde el mundo anglosajón a nuestro país. Y, como no podía ser de otra manera, la primera persona que apoyó esta iniciativa fue Pepín Fernández, dueño de las ya míticas Galerías Preciados. El empresario promovió la necesidad de hacer regalos a los seres más queridos.
A principios del mes de febrero de ese mismo año, la prensa nacional ya publicaba anuncios en los que los grandes almacenes alentaban a la gente a celebrar el día de San Valentín. La iniciativa tuvo tanto éxito que, actualmente, cada vez son más los lugares que se unen a esta famosa celebración. Por lo que parece, no se puede luchar contra el amor (y menos aún contra las ganas de consumir).
San Valentín en el mundo
Esta es la manera en la que se celebra San Valentín a lo largo de todo el mundo:
Japón
En Japón son las mujeres las que sacan su lado más romántico y atrevido. Por eso, el 14 de febrero regalan chocolates a los hombres de su vida. Y dependiendo del amor que profesen hacia ellos, amistad, sentimental, familiar…, el chocolate será diferente.
Taiwán
En Taiwán son los hombres los que regalan bombones a las mujeres. Y, además, la tradición marca que también deben entregar un ramo de rosas. La clave está en la cantidad de flores.
Estados Unidos
Los norteamericanos celebran el Día de los Enamorados de una manera muy parecida a como lo hacemos en España. Lo normal es intercambiarse tarjetas con el típico emblema “Be my Valentine” y entregárselas a las personas por las que se sienta un especial interés o simplemente como una demostración de amistad.
Perú
En este país es común regalar orquídeas, símbolo del amor profundo, a las personas que amas. Esta tradición se ha extendido a otros países del Sur de América.
Alemania
Los enamorados intercambian flores y bombones como en muchos países, pero con la peculiaridad de incluir la imagen de un cerdo. Regalar un cerdo en forma de imagen, figura de miniatura o de chocolate significa suerte y lujuria.
Gran Bretaña
En víspera de San Valentín, existe una tradición para las mujeres solteras: deben colocar 5 hojas de laurel, una en cada esquina de la almohada y la última en el centro, para atraer en sus sueños a su futuro marido.
Escandinavia
En estos países nórdicos existe una tradición que se ha conservado durante muchos años, a pesar de la festividad occidental. Los hombres regalan ‘Gaekkebrev‘ a sus amadas. Se trata de pequeños poemas con rimas divertidas que envían de manera anónima, poniendo como remitente tantos puntos como letras tenga su nombre.
Croacia
Se regalan un detalle, que consiste en entregar al afortunado un bizcocho con forma de corazón hecho de pan de jengibre y miel. Suelen estar decorados con colores vivos y normalmente llevan escrita una frase de amor.