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En las distintas comunidades autónomas ya se han dado a conocer los días lectivos del próximo curso, por edades, cursos y escolarizaciones. La horquilla de comienzo y final de curso es similar. Es decir, entre la segunda semana de septiembre del presente año 2018 comienza de nuevo el cole y el Instituto y acabará la penúltima de junio del año que viene.

Respecto al presente año, las clases van a terminarse en cualquier momento a partir de la última semana del mes de junio, con lo que el verano comenzará con todas sus posibilidades para los estudiantes y los escolares. Además de los consabidos problemas de organización e intendencia familiar que suponen para las familias compuestas por padres y madres empleados, trabajadores, autónomos o empresarios y comerciantes.

Dos meses y medio de verano

Hay que tener en cuenta, además, que oficialmente el verano de este año 2018 comienza el 21 de junio, hoy. Según informa la agencia de prensa española Europa Press, el solsticio de verano, que se produce todos los años a finales del mes de junio, marca en el hemisferio norte el momento en que el sol permanece más horas sobre el horizonte, al revés que en el sur.

De esta forma, añade, «este año, el verano comenzará el 21 de junio a las 10.07 hora GMT (12.07 hora oficial peninsular española), según cálculos del Observatorio Astronómico Nacional. Esta estación durará 93 días y 15 horas, y terminará el 23 de septiembre con el comienzo del otoño«.

Pero, por mucho que llegue oficialmente el verano el día 21 de junio, todas las familias saben que será el día que acaben las clases cuando, realmente, comenzará este verano de 2018. Quedará, entonces, por delante la última semana de junio y los meses completos de julio y agosto, además de buena parte de la primera quincena de septiembre, según las edades de los escolares y estudiantes.

Esto se traduce en que la organización familiar cambia de forma radical. Y no como en Navidades, los puentes o la Semana Santa, sino que queda por delante un conjunto de entre ochenta y noventa días. Dos meses y medio que pueden hacerse muy largos tanto para los mayores como los pequeños y los adolescentes.

Consejos para disfrutar del verano

Por esta razón, ésta es una serie de ideas para garantizar un disfrute adecuado del periodo vacacional no lectivo:

  1. Lugar de residencia: Maximizar los servicios, parques, oferta municipal y adecuar los nuevos horarios para garantizar una cobertura diaria del ocio y las actividades suficiente para el ocio de los pequeños y jóvenes.
  2. Destino vacacional: Children friendly si los niños son pequeños y que tenga algún gancho interesante si los jovencitos ya son adolescentes. El mejor truco de todos es elegir este destino en familia, con una serie de reuniones, sopesando atractivos y ventajas, adecuando presupuesto, y combinando las posibilidades del lugar de destino con las querencias y deseos de los miembros de la unidad familiar.
  3. Organización y flexibilidad. Es importante mantener la organización que tienes dentro del núcleo familiar también en vacaciones. Y que exista cierta continuidad en las obligaciones de los niños. En periodos de tiempo libre puedes relajarte un poco y aumentar la flexibilidad de las exigencias como, por ejemplo, con pequeños cambios en los horarios de comida, o permitirles irse a la cama un poco más tarde.
  4. Siete actividades para hacer en familia. Y tanto en el lugar de residencia como en el destino vacacional, nada mejor que esta serie de propuestas que pueden hacer que los días de descanso y de verano sean precisamente lo que se pretende. Las vacaciones de verano son el mejor momento para adquirir nuevos conocimientos y vivir increíbles aventuras con tu familia. Ya sea en casa o haciendo campamentos de verano, hay infinidad de posibilidades a tu disposición para sacar el máximo provecho a este tiempo sin escuela.

Curiosidades del solsticio

Como curiosidades, «el solsticio del verano puede darse a lo sumo en tres fechas distintas del calendario: los días 20, 21 y 22 de junio, aunque durante el siglo XXI sólo se dará los días 20 y 21 de junio. El inicio más tempranero sucederá el año 2096, y el inicio más tardío ocurrió en 2003«.

O también, «si llamamos duración del día al tiempo que transcurre entre la salida y la puesta del Sol, el próximo día 21 de junio va a ser el día de mayor duración del año. Como ejemplo, en Madrid esta duración será de 15 horas y 3 minutos, a comparar con las 9 horas y 17 minutos que durará el día más corto, el 21 de diciembre. Como se puede ver, hay casi seis horas de diferencia entre el día más corto y el más largo«.

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